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Hemos producido una experiencia de realidad virtual en la que te llevamos a la fábrica de nuestro proveedor Flex en Zhuhai (China), donde puedes ponerte en la piel de un trabajador durante un día
Todos los productos de Google que utilizamos los ha creado alguien en algún lugar. Unas personas extrajeron de una mina las materias primas que se utilizaron para fabricar las piezas de un teléfono, y unos operadores de una fábrica montaron esas piezas. Otros trabajadores ayudaron a transportar los productos acabados de la fábrica al palé, del puerto al almacén y del camión a la tienda. Es un proceso complejo, en el que cientos de personas tocan el producto antes de que llegue a nuestras manos.
Sin estas personas, no tendríamos nuestros productos. Ahora, gracias a una nueva experiencia de realidad virtual (RV) producida por Google, tienes la oportunidad de conocer a algunas de ellas.
En la experiencia de realidad virtual Made by Me, te llevamos a la fábrica de nuestro proveedor Flex, en Zhuhai (China), donde podrás ponerte en la piel de un trabajador durante un día. Con un smartphone y Daydream View, Cardboard o algún otro visor de RV, los espectadores se sumergen en un entorno de 360 grados. Podrás observar cómo es la fábrica, observar el rostro de los empleados durante un concierto improvisado en un descanso o, simplemente, centrarte en la persona que habla.
También podrás escuchar directamente a los trabajadores, que hablarán sobre su salario, las condiciones laborales, la calidad de los productos, sus aficiones favoritas y sus aspiraciones en la vida. Si bien Made by Me se diseñó como una experiencia de RV, cualquiera puede ver el vídeo en YouTube sin un visor de RV.
Convertimos en personal lo impersonal
Nuestro programa de cadena de suministro responsable se centra en dar prioridad a los trabajadores estableciendo expectativas de trato justo y condiciones laborales seguras en las fábricas de nuestros proveedores. Made by Me revela el lado humano del trabajo que hacemos y por qué lo hacemos. A menudo, la responsabilidad de la cadena de suministro puede parecer una red impersonal de políticas empresariales, leyes y auditorías de cumplimiento, pero también representa un compromiso con los derechos y el bienestar de todas las personas que fabrican nuestros productos y nos prestan servicios.
La protagonista de la historia, Wen, se marchó de su pueblo hace cinco años para trabajar en una fábrica de Flex. Atraída por la reputación de la empresa de ofrecer salarios justos y un trato ético, fue ascendiendo de operaria en la línea de fabricación a líder de un equipo de 20 personas. Su historia es habitual en nuestra cadena de suministro. Ella quiere un buen salario, condiciones de trabajo saludables y la oportunidad de cubrir las necesidades de su familia. Al igual que muchos trabajadores del sector de la alta tecnología de todo el mundo, le encantaría comprarse una casa algún día, pero se ve limitada por el floreciente mercado inmobiliario de Zhuhai.
Al contar las historias de Wen y otras personas, desvelamos cómo es trabajar en la fábrica de un proveedor. ¿Qué hay en la residencia de un trabajador? ¿Cómo consiguen los jefes de equipo que sus trabajadores se impliquen? ¿Cómo son las áreas de montaje? ¿Qué opinan de la calidad de nuestros productos quienes los fabrican?
También te permitimos asomarte a cadenas de suministro que rara vez se ven. La mayoría de las noticias sobre proveedores de tecnología se centran en infracciones laborales y de seguridad, pero a menudo pasan por alto presentarte a las personas a las que nuestras políticas pretenden proteger. Durante la experiencia Made by Me, los usuarios se dan cuenta de que los objetivos y aspiraciones de los trabajadores de las fábricas en China no son tan diferentes de los de los trabajadores del sector tecnológico de Silicon Valley.
Estar ahí sin estarlo realmente
Para grabar Made by Me hemos utilizado nuestras tecnologías de realidad virtual más recientes, que nos ayudaron a crear una experiencia totalmente inmersiva. Una cámara Yi Halo de 17 lentes grabó imágenes de 360 grados que permiten ver lo que ve un trabajador de la cadena de suministro en todas las direcciones sin perder ningún detalle. Pudimos agilizar la producción con nuestro software ensamblador Jump, que une automáticamente las grabaciones una vez subidas a Google Cloud.
Como resultado, en apenas unas semanas pudimos producir una experiencia de realidad virtual fluida y de calidad profesional, lo que demuestra su potencial como herramienta de narrativa de marca para cineastas con recursos limitados. En Google también intentamos que la realidad virtual sea más accesible a través de Google Cardboard, un visor de realidad virtual que casi cualquiera puede construir o comprar.
Elegimos la realidad virtual como medio para Made by Me porque queremos que los consumidores y colaboradores de Google escuchen directamente a los trabajadores, no solo que los conozcan a través de las noticias. La realidad virtual te lleva a la misma sala en la que están las personas que fabrican los productos que usas a diario. Es lo más cerca que la mayoría de los espectadores estarán de pisar la fábrica de un proveedor.
Desmitificar, no negar
Nos esmeramos para asegurarnos de que nuestros proveedores tratan a los trabajadores de manera justa y respetuosa. Cuando elegimos un nuevo proveedor o adelantamos la fecha de lanzamiento de un producto, sabemos que no solo estamos cambiando algunos números en una línea de fabricación: estamos influyendo en la vida de las personas.
La intención de Made by Me no es ocultar la realidad de las cadenas de suministro y, en una tan grande como la nuestra, a veces se producen infracciones. Nuestro objetivo es desmitificar cómo se fabrican nuestros productos y ayudar a los espectadores a comprender el impacto humano que tienen nuestras decisiones… y las suyas.